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Yoga & Sensualidad. Una búsqueda activa de la energía más femenina

 

Por Ximena García

Cuando Zulema, fundadora de IgersYoga, me invitó a escribir un post sobre sensualidad y yoga, inmediatamente sonreí y acepté. Y ¿cómo no hacerlo? si me encanta hablar de ella (la sensualidad) y acompañar a otras mujeres a que la despierten y conecten con ella ¡nuestra aliada y amiga! Para mí, es la llave que me ha regalado mi cuerpo de mujer y que me ha guiado al encuentro con mi poder, libertad y el goce de mi cuerpo ¡de mi vida!, por eso me ilusiona muchísimo compartir lo que voy a escribir, contigo que me lees.

[vc_separator type=»transparent» up=»30″ up_style=»px» down=»0″ down_style=»px»][no_blockquote text=»Estoy acostumbrada a que en mis clases haya mujeres que me miren con rareza, se sientan dudosas e incómodas, incluso hay algunas que no vuelven. Mujeres que al contarles sobre mi trabajo me miran escépticas, otras lo hacen curiosas. También he conocido mujeres que quieren menos de “eso” (que les cuesta trabajo nombrar) sin embargo, siguen regresando a cada clase (y que conste que por “eso” me refiero a la sensualidad). Mujeres que vibran con mi propuesta y llegan a cada clase dispuestas. ¿Por qué surgen estas sensaciones y actitudes tan diversas? Pienso que tal vez en su interior esté despertando algo que las mueve y frente esto hay mujeres que eligen mirar hacia otro lado y otras que prefieren explorar y descubrirse.» show_border=»no» show_quote_icon=»yes» quote_icon_font=»with_icon» text_color=»#283033″ quote_icon_color=»#eaeaea» quote_icon_size=»105″][vc_separator type=»transparent» up=»35″ up_style=»px» down=»0″ down_style=»px»][vc_column_text] [/vc_column_text][vc_separator type=»transparent» position=»center» color=»» border_style=»» width=»» thickness=»» up=»35″ up_style=»px» down=»0″ down_style=»px»][vc_column_text]

Antes de continuar, quiero plantearte unas preguntas. Como mujer:

  • ¿Cuándo se trata de que explores tu sensualidad ¿te sientes cómoda? ¿te avergüenzas?
  • Al hablar de sensualidad ¿crees que es algo que otras mujeres tienen pero tú no?
  • ¿Te consideras sensual? sea cual sea tu respuesta ¿lo has dicho con firmeza? ¿has dudado?
  • ¿Quieres sentirte sensual pero al mismo tiempo piensas que la sensualidad es ajena a ti?
  • ¿Sensualidad? Que lo intenten otras, yo estoy bien así.

 

A través de mi trabajo con mujeres me he dado cuenta de lo frecuente que suele ser esta primera sensación de incomodidad e indisposición frente a la sensualidad, incluso hay quienes por un momento han llegado a sentir culpa.

Sin embargo, al mismo tiempo cada día descubro que el deseo que tenemos por encontrar nuestro ser sensual es real ¡está vivo! Afortunadamente cada vez hay más mujeres curiosas y dispuestas a atravesar su incomodidad para explorar y expresar la feminidad de su cuerpo, (re)conectar con su poder, con la capacidad creadora y transformadora que vive en ellas.

Me atrevo a citar lo que dos mujeres me han compartido en mi día a día no soy así, pero vengo aquí y me libero, me permito ser otra”, “tus clases pusieron al revés todo lo que había imaginado sobre estar embarazada, tus palabras sonaban tan extrañas y reales que calaron muy rápido en mis percepciones. De verdad creo que probar su sensualidad es un regalo que se hacen a ellas mismas.

 

Al respecto tengo la creencia de que vivimos en una sociedad y cultura que nos ha enseñado a ignorar la fuerza de nuestro cuerpo femenino, que concibe la feminidad como una debilidad, y la sensualidad como algo que es “malo” o que como mujeres “normales” no nos pertenece; provocando que aprendamos a vivir con una distancia enoooorme entre nuestro cuerpo y nuestra esencia femenina.

Hemos sido enseñadas generación tras generación a no sentir ni conocer nuestro cuerpo ni sus mensajes, por eso es común que cuando de pronto nos sentimos lo hacemos desde nuestros prejuicios, rigidez, desconocimiento y culpa.

 

Creo que tristemente cuando éramos niñas nuestras madres o las mujeres de nuestras familias, no nos regalaron el conocimiento de que nuestro cuerpo es la manifestación de creación, deseo y poder. Que estamos dotadas con un cuerpo maravilloso con curvas, pechos, vientre y caderas, que están ahí para vivirlos con nuestras manos (literalmente) y llenarlos de sensaciones; pues ¡es en ellos donde la vida y el deseo resuenan y nosotras con ellos!

 

Creo que hemos desvirtuado la esencia de la sensualidad y erróneamente la vivimos como una mera apariencia física y como un medio que tenemos para agradar a otros. Con base en mi propia experiencia puedo decir que la sensualidad es energía, es la llave que tenemos como mujeres para abrirnos a nuestro cuerpo y expresar nuestra esencia femenina única y particular (re)conectando con quienes somos, con la vida, la pasión y el deseo de vivirla.

 

La sensualidad habita nuestro cuerpo, nuestros pechos, vientre y caderas y por eso cuando los exploramos con consciencia y los liberamos también nos liberamos a nosotras mismas, comenzamos a escuchar nuestra verdad y nos volvemos a conectar con nuestro encanto por ser quien somos.

Por ello considero muy importante que en relación a la sensualidad comencemos a ver todas las tonalidades pues en el medio del negro y el blanco hay muchos colores con su diversidad de tonos, y ahí es donde te encuentras tu con la posibilidad infinita de probar cada una, corriendo el riesgo (aventura) de ir a un lugar de ti misma que aún no has probado, conociéndote más profundamente en cada viaje.

 

¿Por qué yoga y sensualidad?

Como tal, la práctica de asanas fue creada hace miles de años por hombres de una cultura muy diferente a la nuestra, con otras creencias y realidades, con necesidades de desarrollo y transcendencia particulares para los hombres de esa época, y hago hincapié en la palabra hombres, porque entre el cuerpo de un hombre y una mujer, hay una gran diferencia física, energética y emocional.

Sí, el yoga nos ayuda a conectarnos con la mente y cuerpo, con nuestra fortaleza, tal vez con nuestra espiritualidad. Sin embargo, me doy cuenta que como mujeres, en el mundo “dentro sobre el mat” nos sucede lo mismo que en el mundo “fuera de él” gran parte lo hacemos desde la visión y energía masculina.

Considero que el yoga tradicional por sí mismo no brinda la posibilidad de explorar con consciencia el cuerpo de mujer y por lo tanto es necesario encontrar un espacio donde nos reconectemos y volvamos a encontrarnos como seres energéticamente femeninos, recordando que la feminidad es otro tipo de poder y fortaleza.

 

Concibo el yoga como conexión con el cuerpo, libertad y movimiento (cambio) y como tal creo en un yoga que evoluciona (o que al menos sería bueno que lo hiciera) que se transforme con nosotros, que se enriquezca a través de las generaciones: con nuestra realidad y necesidades actuales. Si es así ¿por qué no hacerlo desde el movimiento natural e instintivo del cuerpo de una mujer a través del cual se expresa su feminidad y sensualidad?

 

Indagando en mis propias reflexiones es por lo que apuesto por un yoga sensual y femenino, donde la práctica y las asanas siguen siendo la base, donde la esencia sigue siendo la conexión con el cuerpo, el movimiento y el cambio. Sin embargo, el propósito y lo que quiero compartir es diferente.

Es un espacio para despertar y celebrar nuestra energía creadora. Es acompañar a la mujer en el encuentro con su feminidad, en la exploración y expresión de su sensualidad de manera consciente; que conecte con su cuerpo de mujer y resuene con él dando movimiento y despertando las zonas de su cuerpo donde surge la vida y el deseo de vivirla: la cadencia de sus pechos, vientre y caderas.

 

[vc_separator type=»transparent» up=»30″ up_style=»px» down=»0″ down_style=»px»][no_blockquote text=»Creo que al hacerlo y (re) conectar con nuestro cuerpo de forma consciente a través de nuestra feminidad y sensualidad, abrimos una puerta donde puede entrar nuestra verdadera esencia, damos pie a nuestra transformación como mujer salvaje -un ser libre y creador. Poco a poco nos reconciliamos con nuestro cuerpo y podemos ser mas amorosas y empáticas con nosotras mismas, nos damos la oportunidad de vivir con más autenticidad y disfrute nuestro cuerpo y por ende la vida.» show_border=»no» show_quote_icon=»yes» quote_icon_font=»with_icon» text_color=»#283033″ quote_icon_color=»#eaeaea» quote_icon_size=»105″][vc_separator type=»transparent» up=»35″ up_style=»px» down=»0″ down_style=»px»][vc_column_text] [/vc_column_text][vc_separator type=»transparent» position=»center» color=»» border_style=»» width=»» thickness=»» up=»35″ up_style=»px» down=»0″ down_style=»px»][vc_column_text]

Ximena García, fundadora de Grandiosa Yoga.

Psicóloga y Psicoterapeuta humanista, Doula y asesora en lactancia. Profesora de Vinyasa Yoga, Yoga Prenatal y Yoga Post-parto, Especialista en trabajar con mujeres a través su sensualidad con consciencia. Un método revolucionario en nuestro país, a través del cual Ximena ayuda a mujeres a activar su energía más femenina, en muchos casos olvidada o anulada, a favor nuestra energía masculina.

 

Descubre todas sus clases y talleres en www.grandiosayoga.com o en @grandiosayoga